viernes, 30 de agosto de 2013

Levántate



Cáete, rómpete la cabeza contra el suelo, que el corazón te salte en mil pedazos.

Un día hace años te regalaron una vida, a ti y solo a ti, y cada uno intenta usarla como buenamente puede. Tal vez elijas rasgar la tuya. Te viste en muchos momentos en los que creíste saltar al vacío. Saltaste, caíste de pie, de rodillas, te aplastaste contra las piedras. No obstante, pese a todo, ahí sigues, buscando y encontrándolo. Sigues viva. Tu vida, la vida, sigue.

A veces llega un momento en que los hechos, las circunstancias, no son fáciles. A veces todo nos devora, nos supera. A veces las cosas no son como habíamos planeado, como creíamos o esperábamos. Párate un momento, coge aire, respira, observa lo que te rodea, mira el resto del mundo. Tal vez para construir tu futuro tengas que romper con tu pasado; pero recuerda, todas y cada una de las personas que aportaron algo a tu vida, bueno y malo, han formado parte de ella. Sin ellas no serías quien eres, no elegirías tu camino, no buscarías ese camino. Agradéceles ser quien eres, buscar el cambio o seguir como siempre.

Cáete, rómpete la cabeza contra el suelo, que el corazón te salte en mil pedazos. Para levantarte tienes que caerte, para reconstruirte debes romperte, para recomponerte hacerte añicos. Tanto si miras a los ojos del que tiene toda la vida por delante como si observas a aquel que tiene arrugas en los párpados, te darás cuenta de que en algún momento la vida puede ser maravillosa. Y cuando ese momento llegue, disfrútalo. Hasta que venga el siguiente.


Ya que la vida se ríe de mí ahora ha llegado el momento en el que yo me ría de ella. 

martes, 20 de agosto de 2013

Tal vez




Y aun pasando el tiempo no entiendo qué me pasa. Por qué me sigo quemando las ideas, las noches, los bolsillos por ti. Y, ¿sabes?, ya me he cansado. Tal vez algún día escriba mientras duermes, seas la esperanza de la humanidad, la luna nos encuentre. Tal vez. 

No obstante, mi vida es mía, cuando quieras formar parte de ella búscame. Tal vez te abra la puerta.

lunes, 19 de agosto de 2013

Miedo


"El miedo es como la familia, que todo el mundo tiene una, pero aunque se parezcan, los miedos son tan personales y tan diferentes como puedan ser todas las familias del mundo.
Hay miedos tan simples como desnudarse ante un extraño, miedos con los que uno aprender a ir conviviendo; hay miedos hechos de inseguridades, miedo a quedarnos atrás, miedo a no ser lo que soñamos, a no dar la talla, miedo a que nadie entienda lo que queremos ser; hay miedos que nos va dejando la conciencia: el miedo a ser culpables de lo que les pasa a los demás; y también el miedo a lo que no queremos sentir, a lo que no queremos mirar, a lo desconocido… como el miedo a la muerte, a quien alguien a quien queremos desaparezca... Pero la felicidad es la ausencia del miedo. Y entonces, me he dado cuenta de que, últimamente, yo ya no tengo miedo a nada.
Librarse del miedo es como quitarse la ropa delante de alguien, a veces cuesta, pero cuando empiezas lo único que tienes que hacer es seguir, sin dudar, y de repente te das cuenta de que el miedo ya no te pertenece… ha desaparecido… como esa ropa que un día dejas de usar."

Los Hombres de Paco - Capítulo 68: Miranda al natural 


Vivo con miedo desde el día en que te fuiste y yo no estaba... vivo con miedo de que te vayas y yo no esté. No sé librarme de esta ropa.

Copyright

Licencia de Creative Commons
Maduramente infantiloide by Callecuerda is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-CompartirIgual 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en http://maduramenteinfantiloide.blogspot.it/.