martes, 12 de febrero de 2013

Click



Me mira a los ojos fijamente y siento como algo se despierta dentro de mí, como un botón cuando hace “click”. Intento apartar la mirada pero creo que ya es demasiado tarde.

Me ha atrapado.

Ese “click” ha encendido la mecha y mi cuerpo es ahora mismo un almacén hasta los topes de pólvora. Probablemente acabemos volando en mil pedazos. No me importa. Sus labios rojos son un imán del que debería de alejarme, pero ya se sabe: pase lo que pase los polos opuestos se atraen, es inútil oponer resistencia.

Sonríe por encima de su abrigo, con esos ojos capaces de mirar con deseo y con cariño a partes iguales. Mis músculos se derriten y se prenden…

Vuelve a mirarme, me tiende la mano provocándome y yo… yo estoy dispuesta a dejarme a arrastrar hasta ese lugar desconocido y en apariencia oscuro. La curiosidad por saltar al precipicio me devora.

Saltemos.

1 comentario:

Copyright

Licencia de Creative Commons
Maduramente infantiloide by Callecuerda is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-CompartirIgual 3.0 Unported License.
Creado a partir de la obra en http://maduramenteinfantiloide.blogspot.it/.